Los pellets para aves son pequeñas piezas firmes de alimento que reducen el desperdicio y el polvo y fluyen bien en la mayoría de los comederos.
Son ideales para aves adultas: elige pellets de postura para gallinas ponedoras (con calcio extra para cáscaras fuertes) y pellets de recría/todo el rebaño para gallos, pollos en crecimiento y parvadas mixtas. Los pollitos pequeños suelen hacerlo mejor con migajas (crumbles) al principio; cambia a pellets cuando sean más grandes. Al cambiar de alimento, mezcla el viejo y el nuevo durante 5–7 días para evitar malestares digestivos. Mantén los pellets secos y frescos y rellena a diario para que tus aves coman bien.